La Universidad de Almería ha querido poner en valor su peso intrínseco en la sociedad local durante su su vigésimo aniversario con un estudio que analiza su impacto económico en la provincia, coordinado por José Céspedes y Almudena Guarnido.

Este informe pone de manifiesto datos como los de la aportación de la Universidad de Almería al PIB provincial, que se sitúa en un 5%, o el número de graduados, ingenieros técnicos, licenciados e ingenieros que acaban sus estudios cada año y que se sitúa en 2.500. En el informe puede verse también cómo la tasa de desempleo de personas con estudios universitarios es muy inferior (casi 15 puntos porcentuales en el año 2011) a la tasa de desempleo total. En el caso de Almería, el porcentaje que representan los parados registrados con estudios universitarios sobre el total de parados, está por debajo del porcentaje de la población universitaria (en torno a 5 puntos porcentuales en los últimos años), lo que es un indicio de la mayor inserción laboral de las personas con estudios universitarios en la provincia.

Otro de los aspectos relevantes que pone este estudio es que en el año 2011, que es el último año tomado como referencia en la realización de este estudio, la Universidad de Almería aportó a la economía provincial y regional 619 millones de euros en producción, 150 millones de euros en valor añadido o renta y una demanda de empleo de 2.421 personas. Comparando esa cifra con los datos alcanzados diez años antes, la renta se incrementó un 43,78% y la producción un 45,92%. El trabajo realiza un exhaustivo análisis de la evolución histórica de la universidad en las dos últimas décadas y hace referencia al contexto socio-económico provincial, las actividades docentes y la investigación realizada. El estudio muestra cuáles han sido los principales hitos, cifras, eventos y actividades a lo largo de este tiempo, referencias que permiten enmarcar el papel que la universidad ha tenido como institución dinamizadora de la provincia de Almería en los ámbitos económico, social y cultural. Uno de los datos señalados es la capacidad de atracción de estudiantes extranjeros, que representan casi el 4% del alumnado, cifra que se sitúa por encima de la media nacional en universidades del tamaño de la de Almería.

Pedro Molina, el rector de la Universidad de Almería, destaca las “excelentes” relaciones que existen entre la universidad y el tejido productivo y la necesaria apuesta que debe hacerse por el conocimiento como vía para salir de la crisis. En idéntico sentido se ha manifestado también el presidente del Consejo Social de la institución, Joaquín Moya-Angeler: “Una de las cosas que no entiendo es que el Estado no haga una apuesta por la universidad, la formación y la investigación como forma de salida de la crisis. La universidad es un pilar básico y debería colocarse entre las cuatro o cinco primeras cosas prioritarias que el Gobierno debería de hacer”. Además de los coordinadores José Céspedes y Almudena Guarnido, han colaborado en la realización de este Informe del Impacto de la Universidad de Almería en la Provincia los profesores Ignacio Amate Fortes, Luis Carlos Berino Díaz de Bedoya, Carlos Cano Guillén, Juan García García y Jorge Tarifa.