Universidad de málaga

Siete reglas para sobrevivir a una entrevista de trabajo

  • Expertos en recursos humanos de tres empresas desvelan las claves en un taller práctico celebrado durante la II Feria de Empresas de Telecomunicación.

Indica en su currículum que habla inglés, ¿podría seguir la entrevista en inglés?" Primera regla para superar una entrevista de trabajo: todas las habilidades que se recogen en el currículum tienen que ser demostrables. El taller práctico de entrevistas de trabajo en el sector tecnológico impartido por expertos de la consultora de recursos humanos HRCS y de las tecnológicas AT4 e Ingenia durante el II Foro de Empresas de Telecomunicación regaló a los estudiantes de la Universidad de Málaga algunas pistas a no olvidar para tener éxito en el mercado laboral.

Raúl Cano, recién titulado en Telecomunicaciones, había hecho constar un manejo del inglés de nivel B2 que tuvo que demostrar ante Santiago Almadana, director de recursos humanos de AT4 Wireless. No valen afirmaciones tautológicas, no cuentan, por ejemplo, declaraciones de liderazgo o de trabajo en equipo sin aval en la trayectoria académica o profesional.

Segunda regla: no hay preguntas inocentes, tampoco inofensivas. El entrevistador, da igual si ejerce de policía bueno como si opta por el papel de malo, mira más allá de la mera respuesta hasta hallar las fisuras por las que se asoma la personalidad del entrevistado. "Interesa su currículum y el expediente, pero también la actitud, personalidad y seguridad del candidato", explicaba Felipe Sánchez, de Ingenia. Un ejemplo: si Raúl Cano hubiera respondido "no" a la pregunta de si tuvo algún problema en su proyecto de fin de carrera los entrevistadores hubieran pensado que mentía. Pero el interés no estaba solo en testar su grado de sinceridad, sino también en sopesar cómo resolvió los problemas, la creatividad e iniciativa que desplegó. Este fue también el filón que descubrió Nisa Luis, del área de recursos humanos de AT4, al entrevistar a la estudiante Rosa Pérez, alumna inmersa en la actualidad en el proyecto de fin de carrera cuyo tutor está de baja por un accidente. ¿Cómo puede resolver esa ausencia? ¿Está decidida a seguir por su cuenta o a esperar a que se reincorpore?, estas son algunas de las cuestiones que saltan sobre la mesa porque dejan ver cuál es la reacción en un escenario de incertidumbre.

El personal de recursos humanos tiene el olfato afinado. Enseguida ve dónde tiene el candidato su material más sensible. Por ejemplo, Miguel Ángel Romero, de HRCS, no escatimó esfuerzos en indagar por qué Ventura Benítez ha estudiado Telecomunicaciones siendo plenamente consciente de que es una carrera que no le interesa. El candidato tuvo que confesar que la eligió porque en Infojob aparecía como la titulación con más salidas. También que no le apasiona. Es más, es consciente de que no le gusta desde el primer curso y, pese a todo, la ha terminado con la vista puesta en hacer después un MBA.

¿Qué se valora de la personalidad? Depende de cada caso y de cada puesto. Interesa la creatividad, el ingenio, la iniciativa y la determinación. Pero puede que no siempre o no en el mismo orden. "Lo fundamental es mantener una actitud positiva siempre y darse a valer" sin caer en la falsedad haciendo ver los aspectos que más le interesan a la empresa. Por tanto, la tercera regla es conocer la empresa. Informarse previamente de su actividad, mercado y filosofía. De esa manera es posible sacar a relucir los aspectos personales que mejor se adaptan al perfil que demanda. Esta fórmula también vale para el aspecto físico: no se puede ir con zapatillas a una entrevista con Deloitte y mejor guardar la corbata para aspirar a un puesto en Google.

Cuarta regla: elude la morralla, pero convierte aspectos personales en baluartes a tu favor. Por ejemplo, Miguel Ángel Romero, de HRCS , aconsejó a Raúl Cano suprimir del apartado de experiencia laboral los trabajos no cualificados que ha realizado durante la carrera para sufragar algunos gastos, pero le animó a incluirlos en el apartado de otras experiencias porque son demostrativos de responsabilidad.

Quinta regla: muestra interés. No es una coletilla instar al candidato a que exprese preguntas y dudas es una manera de observar su interés. Quedarse callado no es buena idea.

Sexta regla: el currículum tiene que ser corto y preciso, preferiblemente siguiendo el modelo europeo (europass), en inglés y español y con un fotografía apropiada. No valen imágenes de fiestorros con los amigos. Posiblemente haya que adaptar el currículum que se presenta a cada oferta de empleo.

Séptima regla: no todas las respuestas se expresan. El lenguaje corporal, la expresión y el aspecto también proporcionan información sobre el aspirante a un puesto de trabajo. Todo cuenta. "La forma de hablar, si tiene las manos quietas o si denota presión, todo cuenta. Los entrevistadores siempre intentamos descolocar a los candidatos para comprobar cómo reaccionan".

La sesión también incluyó dos claves a tener en cuenta para manejarse en el mercado laboral. Primera pista: por qué se eligió la carrera, el expediente, las asignaturas que han interesado más y menos durante los estudios son preguntas inevitables en las entrevistas a los candidatos más jóvenes.

Segunda pista: el mercado profesional empieza a dar síntomas de mejoría en el sector del software. "Empieza a haber demanda de perfiles con experiencia, fundamentalmente en Java y herramientas como Spring, Maven e Hibernate, que no son fáciles de localizar" para las empresas de Málaga. "Los ingenieros con experiencia tienen trabajo y no es fácil que se muevan si no es por dinero, porque durante la crisis se ha perdido mucha capacidad adquisitiva", reconoce Felipe Sánchez. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios