OPINIÓN

Colaboración a todos los niveles para conseguir la empleabilidad de los estudiantes

Carmelo Rodríguez Torreblanca, rector de la Universidad de Almería.

Carmelo Rodríguez Torreblanca, rector de la Universidad de Almería.

La Universidad de hoy en día se define por conceptos, que son fundamentales, como Docencia, Investigación e Innovación, pero también por otros no menos importantes como Responsabilidad Social e Interacción con las Empresas e Instituciones.

Las instituciones de enseñanza superior han de colaborar con otras administraciones, organismos y empresas para impulsar actuaciones, siempre al servicio de la sociedad, con el objetivo de alcanzar una formación de calidad que capacite profesionalmente a nuestro alumnado, generar oportunidades de inserción laboral, y transferir el conocimiento científico al tejido social y productivo del entorno. En la Universidad de Almería hemos encontrado esa colaboración de las instituciones almerienses, las empresas y resto de entidades; un marco de cooperación que vamos a seguir auspiciando porque somos unos convencidos de que la Universidad y el progreso de nuestra sociedad deben ir de la mano.

La simbiosis universidad-empresa es primordial para así disponer de información, de primera mano, sobre la adecuación de la formación que ofrecemos en relación con la que se demanda a la hora de cubrir los puestos de trabajo en el exigente mercado laboral. Es imprescindible que los planes de estudios estén en sintonía con las salidas profesionales. El fomento del emprendimiento debe ser otra de las piezas claves y transversales de la oferta formativa. Hay que pretender que nuestros estudiantes adquieran habilidades emprendedoras, independientemente del título que estén estudiando.

En el mismo sentido, sería oportuno una colaboración institucional por ejemplo, con la  Consejería de Empleo, Empresa y Comercio, con el objeto de establecer actuaciones e iniciativas  que se desarrollen en el seno de las Universidades Públicas Andaluzas, que tengan como finalidad promover la empleabilidad de los universitarios y las universitarias, a través de acciones dirigidas a la intermediación laboral, orientación profesional, fomento del autoempleo, creación de empresas, prácticas en empresas,  o incluso la creación de un Observatorio ocupacional.

Otro aspecto interesante sería el desarrollo de programas de movilidad nacional e internacional con la finalidad de facilitar  la adquisición de determinadas competencias profesionales allí donde mejor puedan obtenerlas. Me refiero fundamentalmente a la realización de prácticas en aquellas empresas e instituciones más acordes con el perfil profesional del titulado o titulada independientemente de que éstas no radiquen en el ámbito andaluz. De esta forma, garantizaremos que la formación para la empleabilidad obtenida por la persona universitaria sea la más competitiva y conveniente para su futuro profesional.

 

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