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La I+D agrícola pierde 113.000 euros

El Ministerio de Hacienda no sólo ha bloqueado fondos de Cultura para arqueología internacional, sino que tampoco ha permitido que se abonen los acordados por el Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias (INIA) para proyectos en el sector agroalimentario, también con el argumento de que en 2011 las comunidades autónomas superaron el déficit.

Esta decisión ha dejado dos iniciativas de la Universidad de Córdoba sin el presupuesto de 113.000 euros que le había aprobado el INIA. Una de las investigaciones está relacionada con el desarrollo instrumentos portátiles de infrarrojos cercanos para detectar sobre el terreno la naturaleza de los cultivos y la segunda aborda la caracterización molecular de los ajos.

“Es desconcertante e injusto” se queja el vicerrector de Investigación de Córdoba, Justo Castaño, quien subraya la “arbitrariedad” de que se haga pagar a los investigadores “por un incumplimiento que no es propio de ellos. La Universidad de Córdoba está al corriente en sus compromisos económicos y no tenemos déficit, pero pese a todo somos las víctimas que tenemos que pagar por ese teórico incumplimiento”.

“Ahorrar en investigación es ahorrar donde no se debe porque nos debe ayudar a salir de la crisis. Imponer aquí la austeridad es un bumerán que se acabará volviendo contra nosostros. Es un destrozo y es tirar el dinero invertido años antes”, abunda Justo Castaño. Desde su punto de vista “no es de recibo recortar en I+D “con excusas burdas”, aún cuando se aluda a razones jurídicas o administrativas.

Los proyectos bloqueados por Hacienda en Córdoba son altamente sensibles en su entorno productivo. En este sentido, el vicerrector de Agricultura recuerda la importancia del sector del ajo en la provincia. Es la principal productora de Andalucía, con uan superficie cultivada próxima a las 2.000 hectáreas, una producción próxima a los 20.000 kilos, que generan alrededor de medio millón de jornales y una facturación global cercana a los 60 millones de euros. En la última décad el sector sufre un duro embate de la competencia china que ha tirado los precios.

 

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