La Escuela Politécnica Superior de Belmez de la Universidad de Córdoba es el segundo centro de estudios mineros más antiguo de Andalucía. Se fundó en 1924 en Belmez, a 70 kilómetros de la capital cordobesa, bajo el nombre de Escuela Práctica de Obreros Mineros y seis años más tarde obtuvo el rango de escuela técnica. Hace nueve décadas esta localidad del Valle del Guadiato superaba los 12.000 habitantes y era una de los municipios más pujantes de la comarca. Gran parte de su economía se basaba en la minería, dada la llegada de numerosa población francesa, en su mayoría ingenieros, que se hizo cargo durante décadas de la cuenca y extracción de materiales tanto de Belmez, como de Peñarroya-Pueblonuevo.

En estas circunstancias surgió este centro en un edificio que aún se conserva cerca de la plaza del Santo. Los primeros alumnos no llegaron a ser más de 40. Ahora, pasados estos 90 años la población de Belmez apenas supera los 3.100 habitantes, aunque el número de alumnos sobrepasa el medio millar, ya que los estudios que oferta la Escuela Politécnica Superior siguen atrayendo a estudiantes. En su mayoría son de los municipios de la comarca del Valle del Guadiato, aunque también proceden de Málaga, la zona Norte de Sevilla, Badajoz y Ciudad Real.

El centro se encuentra desde 1977 en la avenida de la Universidad y su actual director, José María Fernández, lleva un cuarto de siglo al frente de esta escuela. Grado en Ingeniería Civil, Grado en Ingeniería en Recursos Energéticos y Mineros y el doble Grado en Ingeniería Civil y Recursos Energéticos y Mineros son las titulaciones que oferta, con una plantilla compuesta por 50 profesores.

A pesar de que la crisis ha reducido notablemente la obra civil en España, Fernández insiste en la necesidad de impartir todos estos títulos. Es más, no tiene reparos en asegurar que “la obra civil, a pesar de la crisis, continuará”. “Estas son carreras de futuro y los alumnos siempre trabajen en lo que se han formado”, describe. No obstante, este catedrático de escuela universitaria explica que “muchos alumnos trabajan ahora fuera de España en países emergentes como Brasil o México”, donde se requiere este tipo de titulaciones. “Este tipo de profesión es así, sobre todo, en la etapa inicial”, subraya.

Fernández destaca como foco de atracción para nuevos estudiantes la implantación, este mismo curso académico, del máster de Tecnología del Agua en la Ingeniería Civil, “que abre las puertas a la investigación y a la obtención del grado de doctor”.

El director de la Escuela Politécnica Superior de Belmez también subraya el contenido práctico de la enseñanzas que se imparten y la apuesta por “la enseñanza personalizada, con un sistema de clases no masificadas, participativas, con grupos reducidos, trabajo en seminarios, laboratorios y prácticas que redundan en el éxito académico”. En definitiva, “la Escuela Politécnica Superior de Belmez es un centro “cercano, práctico y personal”, considera. Otro de los factores claves del centro es su oferta de programas de intercambio con otras escuelas similares. En este punto, el director destaca los convenios suscritos con la universidad polaca Bialystok University of Technology, gracias al que el alumno obtiene también el título de Ingeniería de la Edificación, con la Universidad Central de Venezuela y con la Universidad Nacional de la Patagonia Austral de Argentina.

La investigación es otro de los puntales de este centro y, según Fernández, en los últimos diez años “los profesores de las distintas áreas de conocimiento han participado en numerosos proyectos de investigación, aproximadamente en 25 contratos I+D+I, 55 proyectos de convocatorias públicas y 60 artículos publicados”.