INVESTIGADOR DE HUELVA

"Los universitarios dedican cinco horas semanales a la videoconsola"

  • Juan Manuel Méndez Garrido investiga desde hace una década junto a colegas de Portugal el consumo de estupefacientes y alcohol, la salud sexual y el uso de las tecnologías entre los estudiantes · Advierte que el cannabis se mantiene

–Llama la atención que usted realizara un estudio sobre consumo de drogas en el ámbito universitario cuando la mayor parte de esos trabajos se orientan hacia la Educación Secundaria. 

–Nuestros trabajos han sido pioneros en España en el ámbito universitario. Todo empezó hace una década con Stopdrogas. Era una iniciativa impulsada con fondos comunitarios Interreg y en colaboración con las universidades portuguesas del Algarve y Beja. Posteriormente, y a través de un convenio con la Consejería de Bienestar Social se puso en marcha el proyecto + Vida - Drogas, que sigue adelante aunque yo ya me desvinculé de él. Ya en 2009, entro a formar parte del grupo de investigación Orientación Educativa y presentamos un proyecto, a través de la Universidad de Huelva (UHU) con fondos europeos. Así nace el proyecto RISE, la Red de Investigadores del Suroeste Europeo que, a su vez, dio a luz un subproyecto: VIVE, que ya tenía un objetivo más amplio: Estudio Transfronterizo: Comportamientos de riesgo para la salud en universitarios de Huelva, Algarve y Beja. VIVE se extendió hasta 2011. A partir de ahí, hemos conseguido el VIVE2, dentro del proyecto global I2TEP, cuyas conclusiones se darán a conocer el próximo mes de junio.

–¿Qué destacaría de esta década de investigación? 

–Lo más importante es la unión de investigadores portugueses y españoles que nos hemos involucrado en una tarea común y que se va manteniendo con el paso de los años. Aparte, y en especial estos últimos años, el recurso a la financiación europea se ha hecho imprescindible dados los recortes experimentados en el campo de la investigación en las administraciones nacionales.

–Yendo al último estudio concluido, VIVE, ¿qué les ha llamado más la atención?

–Nos ha llamado la atención en el campo de las drogas, que el consumo del cannabis se mantiene pero baja el de las drogas más duras. Sin embargo, el cannabis solo capta al 8,3% de los estudiantes onubenses. Lo que nos preocupa es el consumo de alcohol que se hace, en la actualidad, y que está centralizado durante los fines de semana, realizándose un consumo de bebidas de elevada gradación, es decir, lo que suele encontrarse en los botellones.

–Pero ha comentado que este proyecto trasciende el ámbito de las sustancias.

–Efectivamente, hemos tratado otros aspectos. Los resultados que nos hemos encontrado en la Universidad de Huelva y en las del sur de Portugal no varían mucho aunque se puedan encontrar algunas diferencias. Por ejemplo, hay un descenso en el consumo del tabaco salvo en el Politécnico de Beja (Portugal), donde hay un incremento. En Huelva, hay más fumadoras que fumadores ya que de los encuestados, que respondieron afirmativamente, 311 eran mujeres y 207, hombres. El 1% de ellas fuma más de 20 cigarrillos al día. Huelva, de todos modos, fuma menos que las dos universidades portuguesas.

–El uso de las nuevas tecnologías, ¿qué resultados arroja?

–Ese aspecto quedó incluido en el apartado Juegos de azar, medios tecnológicos e internet. Grosso modo, puede decirse que no hay un uso excesivo, ya que da la sensación de que el universitario sabe controlar sus tiempos, pero entiendo que esto merece un trabajo más detallado que vaya más allá del aspecto meramente cuantitativo para acercarse al cualitativo. Precisamente, tenemos en perspectiva un proyecto de seguimiento de los juegos en las nuevas tecnologías, para promover su uso razonable y analizar cómo el uso de estos recursos puede incidir en el futuro profesional del usuario. En cuanto a datos, el estudio señaló que los universitarios de Huelva dedican cuatro o cinco horas semanales a las videoconsolas. Internet es usado por la práctica totalidad para estudiar, mientras que su uso lúdico se realiza, en su inmensa mayoría, en horas nocturnas. El consumo de móvil, por su parte, es muy alto preferentemente en sus hogares.

–En cuanto a la vida sexual y enfermedades de transmisión sexual (ETS), ¿qué les ha llamado la atención?

–Nos llamó mucho la atención de que no hay, supuestamente, mucha información sobre esos temas en el colectivo universitario y que hay un grupo nada despreciable que solo usa el preservativo en relaciones no estables, así como un grupo bastante inferior de los que no lo usan en ningún caso. En las universidades portuguesas la utilización del condón es superior quizá porque allí tienen acceso gratuito a este medida preventiva. El nivel de conocimiento sobre las ETS, al menos, sí alcanza para saber los riesgos que acarrea el VIH (68,5%), el piojo púbico o ladillas (51,7%) o las hepatitis B y C (45,2%). Sin embargo, ese nivel de conocimiento es algo inferior en la Universidad de Huelva que en las del sur de Portugal.

–Ha comentado que el proyecto VIVE está teniendo continuidad en el VIVE2, ¿qué se busca con este último?

–El enunciado completo es Estudio y análisis de materiales, recursos y actividades formativas como herramientas imprescindibles en la prevención de riesgos para la salud en el alumnado de la enseñanza superior en las universidades de Huelva (España), Algarve (Portugal) y el Instituto Politécnico de Beja (Portugal). Pretendemos, por lo tanto, realizar un análisis de las actuaciones que se llevan a cabo en las tres universidades, en lo que respecta a la prevención de riesgos para la salud en las áreas de las adicciones a las drogas y a los nuevos medios tecnológicos, así como a las ETS. Esto implica la propuesta de medidas para el futuro y la puesta en marcha de algunas medidas concretas.

–Aunque las conclusiones de VIVE2 se conocerán en junio, ¿se puede adelantar algo?

–Hemos llegado a dos conclusiones preliminares. La primera es que la Universidad de Huelva, al igual que el Instituto Politécnico de Beja, no realiza suficientes actuaciones en materia de prevención. La segunda conclusión es que las que se llevan a cabo no tienen los efectos deseados sobre el alumnado. En ese sentido, en la UHU se cuenta con un Servicio de Prevención del Tabaquismo y otro de Prevención de Riesgos Laborales, en el que se incluye la Unidad de Salud.

–Cambiando de tema, otro aspecto en el que usted tiene amplia experiencia es el uso de las nuevas tecnologías en el ámbito docente.

–El primer proyecto que surgió, en este campo, fue en 2005en los 16 centros TIC pioneros de Andalucía: 8 de Primaria y otros 8 de Secundaria. A partir de éste, nuestro grupo de Orientación Educativa ha seguido sus trabajos en lo referente a las buenas prácticas en el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en las enseñanzas Primaria y Secundaria, aunque yo no he sido el investigador principal.

–¿Cuál debe ser el término justo del uso de las TIC en la docencia?

–El uso de las TIC tiene que ser una herramienta de ayuda tanto para el profesor como para el alumno y, desde luego, puede llegar a ser un gran aliado para ambos. En el grupo Comunicar hemos hecho varios estudios sobre su uso y repercusión.

–¿Tienen los docentes preparación suficiente para utilizar las nuevas tecnologías?

–Hay una red de formación que la Administración ha puesto a su disposición ya que ésta ha puesto mucho énfasis, estos años, en los recursos tecnológicos. La verdad es que en poco tiempo el cambio, en este campo, ha sido vertiginoso.

–¿Hay materias que salgan más beneficiadas que otras por el uso de las nuevas tecnologías?

–No hay materias en concreto que puedan ser más idóneas para las nuevas tecnologías. Cualquier profesor puede sacarles provecho, pero el docente tiene que ser consciente de que se trata de herramientas de apoyo y que, en ningún caso, representan una sustitución a su labor.

–Pero hay una parte negativa, ustedes mismos han estudiado que pueden llegar a ser una adicción.

–Ese es un gran desafío que tenemos por delante y hay que trabajar en la prevención para que no se llegue a situaciones adictivas, pero la realidad es que las nuevas tecnologías se han convertido ya en una herramienta omnipresente e imprescindible en la formación de los estudiantes. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios