Este miércoles podría ser el día 'D' del desbloqueo de la huelga en Sierra Nevada. Un conflicto que se remonta al principio del verano –casi al terminar la anterior temporada de esquí– y que podría zanjarse con la plasmación del acuerdo entre Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación de esquí granadina, y los trabajadores de remontes.

Con la doble noticia además de que la apertura al público tendría lugar este próximo fin de semana, más concretamente el sábado 24 de noviembre y no el 1 de diciembre como estaba previsto. Y es que las condiciones de nieve son óptimas gracias a las precipitaciones de las últimas semanas que hacen que la estación luzca de un blanco radiante en muchas zonas.

Aunque para que los esquiadores empiecen a descender por el macizo granadino en apenas tres días, antes tendrá que haberse rubricado ese convenio entre Cetursa y los trabajadores en la reunión que se celebra este miércoles a las 12:00 horas en las dependencias del Sercla (Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía).

La Junta ha culminado su informe técnico sobre el preacuerdo entre ambas partes

En dicho encuentro, el comité de empresa de Cetursa espera que se ponga sobre la mesa el preacuerdo económico y laboral aceptado por la Consejería de Economía, Hacienda y Administración Pública de la Junta de Andalucía. Fuentes del Gobierno andaluz han mostrado su "confianza" en un acuerdo que desbloquee este conflicto.

No obstante, desde la parte sindical prefieren mantener la prudencia hasta que se produzca dicha reunión. El presidente del comité de empresa de Cetursa Remontes, Miguel Ángel Vargas (CCOO), ha apuntado a este periódico que "lo mejor es ser cautos" ante una negociación que lleva cinco meses abierta y en la que, según el representante de los trabajadores, han recibido muchos reveses en forma de promesas incumplidas.

"Deseamos que sea verdad", señala Vargas en referencia a que el documento que se les ofrezca en el Sercla tenga garantías y puedan desconvocar la huelga este miércoles. Para ello, tras conocer el contrato que se desplegará en la mesa de negociación, el comité de empresa realizará posteriormente una asamblea en la que serán los trabajadores los que votarán para decidir si aceptan el acuerdo y cancelan la huelga en la estación o modifican el calendario de protestas.

El portavoz de los trabajadores confía en que si se alcanza el acuerdo, la estación pueda abrir sus puertas este próximo fin de semana y ha recalcado que de ser así demostraría "que el acuerdo podría haber llegado hace 15 días o más".

Un lapso de tiempo que para el presidente del comité empresa se traducen en el dinero que la estación ha estado "dejando de ingresar", sobre todo si se tiene en cuenta que las condiciones de nieve en estas fechas es la mejor desde hace casi una década para una estación que a veces ha llegado a abrir con entre 10 y 15 kilómetros de superficie esquiable. "No es normal dejar que abran antes todas las estaciones del norte de España con la prioridad que debería ser Sierra Nevada por lo que genera en el PIB de la provincia".

La plantilla confía en recuperar parte de los derechos laborales detraídos en mayo

La posibilidad de que la estación abra sus puertas al público este fin de semana no se debe solamente de la nieve acumulada en las pistas después de las últimas precipitaciones otoñales, sino a que también se han realizado ya otras tareas como el pisado y además Cetursa ha puesto en funcionamiento algunos días las máquinas para producir nieve.

En todo caso, la amenaza huelga de Sierra Nevada que viene coleando desde hace meses ha dificultado el trabajo de los empresarios que han notado un descensos de las reservas para el inicio de las reservas. Especialmente después del mazazo del pasado 29 de octubre, cuando los trabajadores confirmaron oficialmente que harían huelga en el inicio de temporada debido a que no habían llegado a un acuerdo con Cetursa.

Así, según los cálculos de los responsables hoteleros a principios de mes ya se había un registrado un descenso del 15% en las reservas respecto al año pasado, por lo que exigieron una solución al conflicto.

Este desenlace positivo podría llegar hoy con un acuerdo que supondría un alivio para los empresarios y una alegría para los amantes del esquí. Pero todavía más para los trabajadores en el caso de que recuperen parte de los derechos detraídos el pasado mes de mayo.