La última víctima de violencia machista en España ha sido una mujer de 67 años con esclerosis múltiple que residía en Madrid. Hacía unos meses que la mujer, junto a su hija, había interpuesto una denuncia por malos tratos contra su agresor y ésta no era la primera. El presunto homicida es su marido, un hombre de 68 años que sostiene que dejó morir a su mujer porque ella se lo pidió. Actualmente se encuentra en prisión provisional acusado de un delito de omisión de socorro y otro de homicidio.

Antes de lo ocurrido la víctima se había trasladado con su hija a Sevilla, donde residía. Cuando interpuso la denuncia se le concedió una orden de alejamiento durante seis meses, pero estas medidas finalizaron. No se conoce, por el momento, cuando la mujer regresó a Madrid para vivir con su marido, circunstancias que a veces se dan entre las mujeres víctimas de violencia de género. De entre múltiples factores destaca la tolerancia que las víctimas desarrollan a la agresión en la relación de dominación que ejerce el hombre sobre ellas.

Cuando sucedieron los hechos, el día 4 de diciembre, el acusado contó a los agentes que su pareja, con esclerosis, había sufrido una caída cinco días antes y que fue ella quien le pidió que no la socorriera y la dejara morir. Es por eso por lo que el presunto agresor no le administró sus medicamentos ni le prestó unos cuidados mínimos.

Fue él mismo quien avisó a la Policía para contar lo sucedido pero fue detenido tras comprobar que el hombre tenía denuncias por malos tratos y no había ningún indicios de que la mujer tuviera la voluntad de morir.

Esta sería la víctima número 40 de violencia de género en lo que va de año en España. El número para la atención a víctimas que sufren violencia de género es el 016. Funciona las 24 horas del día y atiende en 52 idiomas diferentes. No deja rastro en la factura.

También está disponible el correo 016-online@igualdad.gob.es. Además, En una situación de emergencia se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062)

Diferencias con el caso de María José Carrasco

Este caso podría recordarnos al protagonizado por Ángel Hernández, un hombre que ayudó a morir a su mujer, María José Carrasco, con esclerosis múltiple, ya que ésta era la voluntad de ella.

Ángel, en un primer momento, también fue detenido. El 3 de noviembre de 2020 el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 5 de Madrid abrió juicio oral contra Hernández por un delito de cooperación al suicidio. Sin embargo la Fiscalía retiró los cargos al comprobar que la voluntad de la fallecida era morir debido a la dependencia total que tenía de su marido.

Éste había pedido una reducción de jornada en 1999 para poderse ocupar de ella y había tenido que hacer una gran inversión para adaptar su casa y que no hubiera barreras arquitectónicas para María José.

Antes de que Ángel le administrara el medicamente que acabó con la vida de María José, ambos habían contactado con la asociación “Derecho a morir dignamente” donde le asesoraron cómo debían proceder, dado que no se había aprobado aun la Ley de Eutanasia.

Además, la mujer había redactado un testamento antes de perder la movilidad de su mano donde decía expresamente que renunciaba a recibir los medicamentos por vía artificial (por una sonda). Estos hechos fueron clave para que Ángel Hernández quedara absuelto.