Desde 2020, la pandemia; en este 2022, la guerra de Ucrania, el alza de la inflación y sus consecuencias todavía por dilucidar. El último barómetro del Centro de Estudios Andaluces refleja en datos las dificultades por las que están pasando muchas familias de la comunidad autónoma, pero también las perspectivas a las que se enfrentan si la situación de alza de precios se mantiene en el tiempo. Un 25% de los encuestados aseguran tener ya dificultades para afrontar sus gastos. Y si continúa la subida de precios, un 20,6% cree que tendrá problemas para pagar el alquiler o la hipoteca y un 13,2%, para comprar alimentos básicos.

Con la mayor tasa de inflación en 37 años en junio (10,2%) y previsiones negativas para final del ejercicio, el aumento de la carestía de vida y la pérdida de poder adquisitivo se consolida como segundo problema para los andaluces (un 10,4%), después del paro (55,1%). El barómetro del Centra hace especial hincapié en esa alza de los precios para analizar qué repercusiones está teniendo en la economía de los andaluces y dibuja un panorama complicado: los encuestados aseguran que si continúa la subida de precios tendrán problemas para pagar los suministros básicos (22,3%), llenar el depósito del vehículo (35,5%),pagar impuestos (27,9%) o la ayuda en el hogar (38,3%).

El barómetro, realizado mediante entrevistas a 3.600 personas, refleja un trimestre más que menos de una quinta parte de la población (18,7%) puede vivir confortablemente con sus ingresos actuales. Un 56,1% asegura que tiene suficiente presupuesto para afrontar sus gastos, pero casi un 25% tiene dificultades o muchas dificultades para llegar a final de mes.

Barómetro del Centra junio 2022

En cuanto a la afección a los hábitos de consumo de los hogares, un 44,9% de los andaluces dice que ha limitado el uso de electrodomésticos en el hogar; el 25,1% gasta menos dinero en ocio y otro 17,5% utiliza menos el coche para sus desplazamientos, recurriendo al transporte público o a la opción de teletrabajo. Solo un 6,2% de los encuestados declara no sentirse afectado por la subida de preciosLa situación económica también tiene su repercusión en el verano de los andaluces. Un 23% asegura que cambiará su destino habitual de vacaciones por la situación económica y un 13,1% no podrá ir de vacaciones por esto mismo.

Al referirse a su economía personal, un 40,5% de los encuestados la definen como buena, un 19,7% como ni buena ni mala y un 27,7% como mala. Y para más de la mitad su situación es igual que hace un año, mientras que para un tercio, esta ha empeorado desde junio de 2021, cuando los datos eran mucho más positivos. No obstante, a pesar de las dificultades, solo un 28,3% considera que empeorará en el próximo año.

Si se pregunta por la economía andaluza, en general, la percepción es más negativa: un 39,5% de los encuestados cree que la comunidad autónoma tendrá una peor evolución que el conjunto del país en los próximos meses.

Aunque no incluye datos de estimación de voto, el estudio (realizado tras las elecciones del 19-J) sí contiene preguntas de carácter político, como la de qué partido cree que puede dar una mejor respuesta a los problemas de Andalucía comentados por los encuestados, a la que un 33,4% responde que el PP, mientras que el 13,2% señala al PSOE y un 10,1% a Vox.

De igual modo, un 38,1% de los encuestados califica como muy buena (5,5%) o buena (32,6%) la situación política actual de Andalucía, por debajo del 47,7% que la considera mala (39,2%) o muy mala (8,5%). Un 21,1% opina que es mejor que la de hace un año, mientras que un 54,7% cree que está igual y un 22,9% que está peor.