El Ejecutivo reduce dos puntos el crecimiento de la economía en 2020, del 1,8% al 1,6%. El déficit para este año se fija en el 1,8%, una décima más de lo que el Economía comunicó a Bruselas en 2019.

El país elevará el PIB un 1,9% en 2019 y un 1,5% en 2020, en ambos casos cuatro décimas por debajo de su proyección anterior. El paro estará aún en el 12,8% en 2021. El Gobierno rebaja una décima el crecimiento para 2019 y se queda en el 2,1%. .

La CE pide a la ministra Calviño que envíe unas cuentas actualizadas tan pronto como el proyecto sea enviado al Congreso.

La tasa de necesidad de financiación del 0,57% del PIB es inferior a la media de las comunidades autónomas, del 0,63%. La deuda pública bate otro récord y se queda al borde de los 1,2 billones de euros..

El endeudamiento de las administraciones públicas se eleva en 11.642 millones en el mes de marzo y se sitúa en el 98,5% del PIB, un punto y medio más que en el cierre de 2018.

Bruselas constata el dinamismo económico, mayor que el de la UE pero también en declive. Las medidas sociales aumentan el desvío presupuestario respecto a lo estimado en noviembre al 2,3% este año y al 2% en 2020.

La ministra Nadia Calviño afirma que la buena ejecución presupuestaria permite esta disminución de 5.000 millones.

Se libra del brazo corrector de Bruselas tras certificarse que el déficit en 2018 fue del 2,48% del PIB, menos que el 2,63% anunciado en marzo por el Gobierno.

El saldo negativo asciende a 31.805 millones de euros, la cifra más baja desde 2007. El país podrá salir este año del procedimiento de déficit excesivo de la Comisión Europea.

Los "viernes sociales" pueden ser una buena estrategia electoral pero son también una grave irresponsabilidad en un contexto en el que la deuda crece y no se cumplen los objetivos marcados.