El próximo 31 de diciembre será el fin de una medida que hasta ahora había dado cierto alivio a miles de comunidades de vecinos en España durante casi un año. La Tarifa Regulada de Gas Natural (TUR), que se implementó como parte del Real Decreto-ley 18/2022, de 18 de octubre, en un esfuerzo por contrarrestar la creciente escalada de precios de la energía, llega a su fin, y esto podría tener un impacto significativo en las facturas de gas para muchas comunidades vecinales en el país.

La TUR vecinal, que se convirtió en una tabla de salvación para aproximadamente 6.700 comunidades de vecinos en España, tenía como objetivo principal reducir los costos de las facturas de gas. Aquellas comunidades de vecinos y/o propietarios de viviendas de uso residencial que tenían un consumo anual de gas superior a 50,000 kWh al año podían acogerse a esta tarifa, que ofrecía un ahorro de aproximadamente el 50%.

Sin embargo, con la llegada del 1 de enero de 2024, las comunidades de vecinos que se habían beneficiado de esta tarifa regulada deberán buscar un nuevo suministrador en el mercado libre. Comercializadoras como Naturgy ya están enviando cartas a estas comunidades recordándoles esta obligación, lo que podría resultar en un aumento sustancial en sus facturas de gas.

El impacto financiero que esta transición podría tener en las comunidades de vecinos es preocupante. Según las estimaciones, es posible que las facturas de gas se disparen hasta un 50% una vez que se implemente la nueva tarifa en el mercado libre.

La medida de la TUR vecinal no solo se centraba en la tarifa en sí, sino que también establecía requisitos específicos para su aplicación. La instalación de un sistema de contadores individualizados y la revisión de las calderas eran obligatorias con el fin de garantizar un funcionamiento más eficiente. Estas medidas se habían implementado para así promover un uso más responsable del gas y reducir el impacto ambiental.

La eliminación de la TUR vecinal ha generado bastantes preocupaciones acerca de la accesibilidad de los servicios energéticos para comunidades de vecinos de bajos ingresos. La gente también está preocupada por la posible pérdida de los beneficios de eficiencia energética logrados a través de la instalación de contadores individuales y la revisión de calderas.

Sabiendo todo esto, es importante que las comunidades de vecinos estén bien informadas sobre las opciones disponibles en el mercado libre y busquen asesoramiento para encontrar la tarifa que mejor se adapte a sus necesidades y presupuestos. Además, la transición podría ser una oportunidad para promover aún más la eficiencia energética y la sostenibilidad en las comunidades de vecinos, fomentando la adopción de tecnologías y prácticas más ecológicas.