El Cádiz CF Mirandilla no pasa del empate ante el Atlético Antoniano (1-1) y se jugará toda la campaña en la última jornada, en la que visitará a La Unión. El filial llevó el paso del encuentro pero no fue suficiente para sumar tres puntos ante un rival que leyó muy bien el partido. El conjunto de Cifuentes sigue metido en líos serios con el descenso a falta de los últimos 90 minutos del curso.

La primera parte puso de manifiesto aquello de que quien controla el esférico no tiene siempre los argumentos suficientes para mandar en el marcador. Es lo que le sucedió al filial cadista, que llevó el peso del juego pero le faltó mordiente y acertar en la zona de tres cuartos para estar cerca del gol.

Las ocasiones en ambas porterías fueron escasas pero el equipo lebrijano tuvo acierto y efectividad para mandar a la red una de las tres que tuvo. La firma la puso Jaime con un testarazo precioso, a centro de Erik Aguado, que se coló a la izquierda de Víctor Aznar.

Antes y después de este tanto el Cádiz CF Mirandilla buscó el área rival con más corazón que cabeza y anticipándose en ocasiones a la hora de resolver, lo que ponía de relieve que la ansiedad jugaba un papel importante en este duelo.

Tras el paso por vestuarios, Cifuentes retiró al amonestado Youba Diarra para cargar el ataque de su equipo con Kensly Vázquez, precisamente un jugador clave al ser el autor del empate a un gol. Fue en la primera acción ofensiva de los locales cuando el delantero se giró al borde del área y con la zurda alojó el esférico lejos del alcance de Antonio Miguel.

A partir de la igualada el dominio del conjunto cadistas fue claro por momentos, con llegadas diversas que pudieron dar la vuelta al marcador. Todo ello con el temor de tener enfrente a un Antoniano que escondía sus armas a la contra a pesar de que físicamente empezaba a estar un punto por debajo.

El segundo periodo avanzó con movimientos en los banquillos y con muchos nervios en el Cádiz CF Mirandilla por su partido y algunos marcadores adversos de rivales directos que le dejaban en zona de descenso directo a la espera de la última jornada.

El ritmo endiablado que sacaba el equipo de Cifuentes era suficiente para llegar con facilidad a la zona de tres cuartos de la escuadra lebrijana, si bien a partir de ahí faltaba puntería y algo de calma para buscar un segundo gol que se antojaba clave en el devenir de toda una temporada.

El encuentro se fue durmiendo en el tramo final sin que pasara nada hasta el balón en el travesaño, en el 95', que casi cambia el rumbo de la jornada. Pero el 1-1 le venía de perlas a un Antoniano que cerraba la campaña sumando en El Rosal y dejando al filial contra las cuerdas de cara a la última jornada, el próximo fin de semana en el campo de La Unión.