La Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Málaga y Provincia, AKIMA, lamenta y asegura no entencer por qué el Área de Vía Pública "se ha dado tanta prisa en retirar los módulos de aquellos kioscos que tienen la licencia extinguida antes de dar opción a nuevas personas interesadas en solicitar las ubicaciones que se están extinguiendo".

Desde la entidad aseguran que, después de estar más de cuatro años esperando las modificaciones de las ordenanzas, si se retiran los módulos y no se da posiblidad al relevo "no se podrán realizar en las mismas las nuevas actividades y servicios que se recogen en las ordenanzas que están a punto de aprobarse". 

El hecho de que retiren los módulos de los kioscos de aquellas ubicaciones ya extintas "no da la oportunidad a que personas que puedan ver en un kiosco su medio de vida, bien por que estén en situación de desempleo o tengan situaciones económicas más vulnerables, de poder adquirir dichos módulos a un precio asequible, antes de que los mismos sean destruidos", comentan desde Akima.

Además, subrayan, que "dichos módulos en su día costaron más de 30.000 euros, se cambió la imagen de Málaga por completo, mejoró la calidad de vida de los antiguos kiosqueros y actualmente muchos de ellos se encuentran en perfecto estado como para poder seguir siendo utilizados". Por tanto, para Akima, "destruir los mismos supone destruir puestos de trabajos, ya que no dan opción a estas personas necesitadas de poder solicitar las ubicaciones que han sido extinguidas y encima si quitan los módulos de las mismas no tendrán opción a poder trabajar en ellos". 

Indican desde Akima que han realizado una consulta sobre el procedimiento al Área de Vía Pública con el objetivo de poder adquirir estas estructuras antes de que sean destruidas, "ya que hay personas interesadas en otras provincias y pueblos que tienen su módulo en mal estado y quieren cambiarlo por uno de estos que están en buen estado, y no saben cómo conseguir un módulo de los que han sido retirados". Sin embargo, sostienen que no han tenido respuesta.

"Igualmente, hemos solicitado varias reuniones con la concejala de Vía Pública y no nos ha querido atender en persona", dicen desde Akima. Además, apuntan, que hay "muchas cuestiones que nos han planteado nuestros asociados y se le queríamos hacer llegar a la concejala directamente". 

"No queremos que este sector desaparezca", reiteran. "Después de la pandemia y tantas vicisitudes que hemos sufrido y esperado tanto tiempo a que se aprobaran las ordenanzas que supondrían la reactivación de nuestros negocios, su modernización con las nuevas actividades que se piensan implantar en los mismos y todas las ilusiones que tenemos se van a quedar reducidas a chatarra. Estamos en peligro de extinción y nos están hundiendo en lugar de ayudarnos", concluyen desde Akima.