El elevado precio de la vivienda en Málaga, que sigue a la cabeza de Andalucía con el alquiler más caro de toda la región, hace que muchos propietarios de locales comerciales se planteen cambiar el uso de sus inmuebles para convertirlos en pisos o apartamentos. Antiguas tiendas que ahora son viviendas. La alta demanda, que no se ve satisfecha por la oferta existente, también hace que algunos busquen en estos espacios una salida residencial.

Asimismo, la alta rentabilidad que se gana con el cambio, hacen que más de uno se lo piense. En concreto, en el caso de Málaga la vivienda vale un 86% más que un local comercial y un 80% más que una oficina, según el portal inmobiliario Idealista.

De ahí el dato conocido a través de un informe del portal inmobiliario Idealista, según información de la Dirección General del Catastro, que cifraba en 839 los locales en Málaga, en su mayoría tiendas, que se han transformado en viviendas en los últimos tres años, desde 2021 hasta finales de 2023.

De estos más de 800 locales, la mayoría eran comercios, siendo el caso de 327 desde el año 2021, pero también había 198 almacenes y trasteros, así como 88 oficinas. Destaca el caso de 60 hoteles que han acabado como viviendas en la provincia, un dato bastante inferior al de otras provincias turísticas como Las Palmas (567) o Santa Cruz de Tenerife (193). Por último, llama la atención el devenir de dos locales que antes tenían uso religioso.

Cómo convertir un local en vivienda

La pregunta aquí es si puede cualquier local puede cambiar de uso y convertirse en una vivienda. Y la respuesta es que no. La solicitud para realizar el cambio se debe presentar ante el ayuntamiento y los inmuebles deben cumplir una serie de requisitos. En general, en el caso del Ayuntamiento de Málaga los requisitos son: altura, superficie, iluminación, ventilación y densidad máxima de viviendas.

En concreto, el local tiene que tener una altura mínima de 2,7 metros, y la superficie mínima de la vivienda resultante sería la de un estudio (30,5 metros cuadrados). Asimismo, la normativa establece que todas las estancias habitables deben tener un hueco de iluminación y ventilación natural. En cuanto a la densidad de viviendas, hay que comprobar si el edificio admite más pisos según la normativa urbanística. 

Por otro lado, además de las condiciones del Ayuntamiento, conviene consultar los estatutos de la comunidad de vecinos en la que se ubique el local, por si se prohíbe expresamente la posibilidad de convertir locales en viviendas.