De la escuela de artillería y dirección de tiro de la Armada apenas queda ya rastro. El acuartelamiento de Janer es poco más que una montaña de escombros toda vez que los trabajos de demolición que Zona Franca está llevando a cabo en la zona están prácticamente acabados.

Del conjunto de construcciones existentes en el interior de este recinto militar de casi 70.000 metros cuadrados tan solo queda en pie el antiguo edificio de Dirección al estar afectado por la zona catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC) y, por tanto, de obligada protección y máxima cautela en el desarrollo de la actuación que se pretende llevar a cabo.

El resto -aulas, talleres, garajes, sollados de marinería y alumnos, cocinas, gimnasio, almacenes y otras dependencias de servicios- ha sido derribado en poco más de dos semanas por la empresa Erri Berri, a la que el Consorcio gaditano ha encargado los trabajos de demolición que, por otro lado, constituyen el paso previo para la puesta en marcha de un gran parque empresarial y comercial que contará también con un establecimiento hotelero. También se han derribado en estos últimos días las fincas colindantes al antiguo cuartel de la Armada que Zona Franca ha adquirido recientemente y que forman también parte del ámbito de actuación propuesto. Ambos inmuebles, de hecho, presentaban una avanzado estado de deterioro.

Según Zona Franca, se han retirado ya 300 camiones de escombros tras la demolición de estas edificaciones, aunque todavía quedan por retirar numerosos restos que, en los próximos días, serán evacuados hasta despejar todos los terrenos del Janer. Con todo, la actuación está ya en su recta final, según las explicaciones dadas tanto por el Ayuntamiento isleño como por el Consorcio. Ambos, de hecho, han mostrado su satisfacción por la buena marcha de estos trabajos.

Una de las tareas que está pendiente y que, precisamente, está previsto acometerse en los próximos días será el derribo de la valla perimetral -de fábrica de ladrillo- que rodea prácticamente todo el recinto. Dicho cerramiento será eliminado del todo y en su lugar se colocará una valla de simple torsión que permitirá la visibilidad desde el exterior mientras se espera que comiencen los trabajos para la puesta en marcha del esperado parque empresarial.

Solo quedará pendiente de sustituir la parte de la valla que está afectada por la zona de servidumbre de la Demarcación de Costas, en la zona que linda con el parque de bomberos y la gasolinera que está a la salida del término municipal de San Fernando. En este tramo del Janer no hay ladrillos desde hace tiempo, solo una valla metálica. La idea de Zona Franca es colocar un cerramiento similar al que está previsto para todo el resto del antiguo acuartelamiento, para lo que está pendiente de la correspondiente autorización de Costas.

También se espera a que Endesa -la empresa responsable del suministro eléctrico- autorice la retirada del tendido aéreo para proceder a la demolición del centro de transformación que existe todavía en el recinto.

Desde Zona Franca -que formalizó la compra de los terrenos al Ministerio de Defensa el pasado 6 de marzo por seis millones de euros- se ha valorado la buena marcha de los trabajos de demolición, que empezaron a mediados de agosto y que terminarán en cuestión de días.

Con la demolición del Janer -que será completamente visible en cuanto derriben el cerramiento- se da un paso decisivo hacia un ambicioso proyecto que aspira a convertirse en el revulsivo económico que La Isla necesita para sacudirse la crisis.

Sin embargo, con esta actuación desaparece también un inmueble de gran arraigo y valor sentimental para varias generaciones de isleños. Como el viejo Cuartel de Instrucción de Marinería, la escuela de artillería y dirección de tiro es, de hecho, una parte de esa historia de San Fernando tan unida a la Armada que se rememora cada vez con más nostalgia.

Desde hace catorce años estas instalaciones estaban cerradas a cal y canto (en 1999, por decisión del Ministerio de Defensa, la escuela fue trasladada a Cartagena) pero su demolición ha convertido definitivamente al Janer -al Janer de la Armada- en historia. Ahora es el momento del Janer de la Zona Franca.