El incierto futuro de las obras de La Magdalena se ha despejado este jueves. La UTE adjudicataria ha dado luz verde al modificado de proyecto elaborado por el equipo redactor, lo que inicia la cuenta atrás para reanudar las obras tras casi dos años de parón.

La alcaldesa, Patricia Cavada, ha confirmado el desbloqueo del proyecto tras la reunión que ha mantenido esta semana con los responsables de la mercantil. Los trabajos volverán a ponerse en marcha. Y solo ese anuncio es ya todo un avance habida cuenta de la complicada situación en la que se encuentran las obras desde que poco después de su inicio -en mayo de 2022- se paralizaran los trabajos por las condiciones geotécnicas de una parte de los terrenos de La Magdalena que las catas previas habían pasado por alto. 

La cuestión, ahora, es cuándo se podrán reanudar las obras. Según las declaraciones realizadas por la regidora, los trabajos podrán retomarse en mes y medio, que es el plazo en el que calcula que se llevarán a cabo los trámites necesarios para que la Junta de Gobierno Local dé luz verde al modificado del proyecto. 

A partir de ese momento, al estar el contrato en vigor y las obras adjudicadas, los trabajos podrían volver a a La Magdalena siempre que no afecten a aquellas cuestiones que tengan que ver directamente con el modificado. Y, de hecho, el gobierno municipal cuenta con que en torno al mes de junio se pueda empezar al menos con los preparativos en la zona para reanudar esta actuación. 

En paralelo -ha explicado Cavada- se acometerá el trámite del Consejo Consultivo, que es necesario por el importe que alcanza la cuantía del modificado del proyecto. Eso deja en manos de este órgano el plazo para la siguiente fase en la reanudación de los trabajos de La Magdalena, si bien el Ayuntamiento estima que este paso llevará "unos dos meses". Así que en torno a septiembre se cree que podría ya afrontarse la aprobación definitiva del modificado con el informe favorable del Consultivo. Y a partir de ahí reanudar la obra con normalidad.

El coste se eleva a 11 millones de euros

El presupuesto de la actuación -ha concretado también la alcaldesa- se eleva a los 11 millones de euros con este modificado debido fundamentalmente a la subida de los costes que se ha registrado en la construcción a raíz de la inflación. 

La financiación de la obra, ha asegurado Cavada, "está garantizada al 100%" con fondos municipales, aunque evidentemente no se descarta que pueda acogerse a cualquier otro programa de ayudas o subvenciones que surja en el transcurso de las obras. 

De los 11 millones hay 4,8 que corresponden desde el principio a la aportación municipal al proyecto. Y el resto -6,2 millones- se afrontarán con cargo al remanente presupuestario. 

La Magdalena, que era el proyecto estrella de la EDUSI (Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado), tendrá así que replantearse su financiación inicial, si bien la alcaldesa ha asegurado una vez más que los fondos europeos "no se han perdido". 

"La Magdalena sigue dentro de la EDUSI y se ha reformulado operaciones por 16 millones de euros", ha recordado al referirse a diversas actuaciones ya ejecutadas en la ciudad que se han incluido en el programa para evitar que se pierdan las ayudas. Y para saber si éstas se aceptan o no "habrá que esperar hasta que Europa resuelva en 2027".  

Así será el parque de La Magdalena tras las modificaciones introducidas para reanudar las obras.

Así queda el proyecto del parque de La Magdalena

La piedra angular en la que se basa el modificado parte de una decisión que se ha adoptado en el contexto planteado por las condiciones del suelo: la de no excavar más allá de 0,5 metros de profundidad habida cuenta de las condiciones del terreno. Inicialmente, el proyecto planteaba hasta un metro. 

Eso ha hecho que se descarte la construcción de unos miradores en altura para contemplar el entorno de caños y marismas que estaban previstos en la zona cercana a las viviendas de Los Pitufos ya que precisan de un pilotaje más profundo. 

Pero también se ha reubicado la zona de aparcamientos planteada en la franja más próxima al entorno del Puente Zuazo, donde los estudios geotécnicos señalan peores condiciones del suelo. El cambio, sin embargo, permitirá aumentar el número de plazas para los vehículos -que de 108 pasa a 237- y acercar más este espacio, lo que dará mayor comodidad para los usuarios.

Son los dos cambios principales. El resto del proyecto se mantiene conforme a los planes originales, que pasan también por dar cabida al recinto ferial durante las fiestas patronales del mes de julio. No obstante, se replantean también con el modificado en algunas cuestiones, por ejemplo, al contemplar la utilización de módulos prefabricados con un diseño especial para los espacios de hostelería o el auditorio al aire libre, que se construirá aprovechando una pradera vegetal en pendiente con el escenario abajo y el paseo marítimo a su espalda. 

Se mantiene también la inclusión de ese espacio multiusos que se ha denominado como El Astillero, que a su vez será la caseta municipal durante la Feria; las pistas deportivas, jardines y paseos, la plantación de diversas especies vegetales y arbolado inicialmente prevista y el soterramiento de toda la infraestructura, que viene a ser clave también para los preparativos de la Feria. 

El problema de La Magdalena, paso a paso

Las obras del parque de La Magdalena se licitaron en abril de 2021 poco después de que se presentara el proyecto redactado por Buró 4, que en líneas generales pretendía la transformación de toda esta zona degradada en un espacio verde puntero dotado de equipamientos desde el puente Zuazo hasta la zona del Zaporito. La idea planteaba una renovación urbana integral en un área de 120.000 metros cuadrados con un presupuesto de 7.630.922,09 euros que se llevaba la mayor parte de los fondos europeos de la EDUSI (Estrategia de Desarrollo Urbano Integrado). 

Hasta 5 ofertas se presentaron para hacerse con la obras, que finalmente se adjudicó a la UTE participada por Aitana, Actividades de Construcción y Servicios SL y Rhodas Albañilería SL. Aunque la adjudicación estaba resuelta desde agosto, la firma del contrato no se formalizó hasta febrero de 2022. 

Las obras se pusieron definitivamente en marcha en el mes de mayo de ese mismo año, hace ahora exactamente dos años. Sin embargo, pronto se vio que la cosa no iba bien. Ese mismo verano, el Ayuntamiento confirmó que las obras se habían paralizado a la espera de un modificado de obra debido a las malas condiciones del terreno por los rellenos del suelo ganado a la antigua salina.