La nueva Avenida de la Cruz Roja, peatonalizada con un sistema de drenaje sostenible que absorbe el agua de lluvia y con las redes de abastecimiento y saneamiento renovadas, se ha abierto este viernes al tránsito tras 14 meses de obras y una inversión de 7,2 millones de euros. Los trabajos comenzaron a mediados de junio de 2021. La apertura de esta vía coincide con el final de las obras en la Ronda Histórica para llevar el carril bici a la calzada, una reforma cuyo primer tramo se abre este sábado y culminará antes del inicio de curso escolar (12 septiembre). 

La apertura de esta vía coincide con el final de las obras en la Ronda Histórica para llevar el carril bici a la calzada

Desde este viernes, la Cruz Roja, pavimentada con alegres colores rojizos y amarillos, ya no tiene aparcamientos en superficie ni tránsito de autobuses ni de vehículos. Solo es para peatones, ciclistas y patinetes, y para el acceso de vecinos a garajes, así como para vehículos de emergencia o municipales. 

El alcalde Antonio Muñoz y el director de Movilidad, José Santiago Lorenzo, han asegurado este viernes que Tussam está analizando cómo va a quedar la movilidad en el barrio para que esta obra no suponga un aislamiento de la calle para sus vecinos o para los que puedan venir de otros puntos aquí. La empresa de transportes está terminando ese estudio sobre todas las líneas que deben dar cobertura a Cruz Roja. "Si surgen nuevas necesidades se actuará y se dará la máxima cobertura", ha declarado el director.  

La nueva Cruz Roja, pavimentada con colores rojizos, queda para peatones, bicis y emergencias .

Las obras siguen en las calles adyacentes a la Cruz Roja.

La calle Manuel Villalbos y, arriba, Doctor Jiménez Díaz.

Aún quedan por terminar varios detalles que se acabarán de aquí a finales de diciembre de este mismo año 2022. Las obras en las calles transversales y anexas (Jorge Montemayor, Doctor Jiménez Díaz y Manuel Villalobos), plantar los 140 árboles nuevos que mejorarán la sombra en esta zona y colocar el mobiliario, las fuentes (también la de acceso de la calle) y los contenedores en superficie que culminarán la transformación urbana integral de esta avenida principal.   

El Ayuntamiento no descarta efectuar cambios que mejoren la movilidad en la zona. El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, acompañado de la delegada del distrito Macarena, Clara Macías, del consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop, y de representantes vecinales, de comerciantes y de la comunidad educativa, ha realizado una visita a la Avenida de la Cruz Roja para compartir los avances de las obras y "seguir analizando medidas y mejoras para los meses que restan de trabajos y para el diseño definitivo de la vía" que quedará una vez que se complete a finales de año su transformación.

Muñoz ha señalado que esta obra satisface a una mayoría de vecinos y comerciantes. En efecto, los grandes cambios de movilidad a cuenta de esta reforma no contentan a algunos vecinos y comerciantes. Las quejas se deben, sobre todo, a la desaparición de todas las líneas de Tussam que antes pasaban por esta calle, de la que solo queda la línea 11 en León XIII, debido a la elevada cantidad de personas mayores que habitan en el barrio.

El alcalde y la edil Macías con vecinos, comerciantes y representantes de la comunidad educativa.

Se critica también el fin de los aparcamientos, que no pueda cruzarse a Cruz Roja por calles transversales y que haya que dar una gran vuelta para salir del barrio. Entre los que se quejan figura la asociación de comerciantes y pymes de Pío XII, cuyo presidente también vicepreside la asociación de comerciantes de la Macarena, José Manuel Silgo. Y vecinos como Alejandro Rodríguez, de la calle Antonio Machín.

El gobierno de la ciudad asegura que mantiene una comunicación permanente con los vecinos y vecinas y los comerciantes de la zona dando respuestas de forma progresiva y en la medida de lo posible a sus peticiones y propuestas en torno al proyecto. El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, mantuvo un encuentro el pasado mes de julio con la asociación de comerciantes. Y recalca que se seguirá trabajando en los próximos meses para realizar más ajustes, si es necesario, al proyecto que se está ejecutando.

Una remodelación que lidera Emasesa

La transformación de la Avenida de la Cruz Roja la lidera Emasesa. Su presupuesto de 7,2 millones de euros cuenta con financiación europea a través del programa Life Watercool. Con este presupuesto se está ejecutando una reforma integral con tres ejes.

Parte de la fuente, aún sin terminar, a la entrada de Cruz Roja.

Vista de la Cruz Roja a falta de las plantaciones de arbustos y árboles nuevos

En primer lugar, se está llevando a cabo una necesaria e imprescindible renovación completa de todas las redes de abastecimiento y saneamiento que se encontraban deterioradas y que generaban problemas de fugas y de prestación del servicio. En total, más de 900 metros de longitud de trazado que contará con nuevas conducciones que mejorarán el servicio que se presta en la zona.

En superficie se desarrolla un nuevo modelo urbano completamente peatonal en la Avenida de la Cruz Roja, con una plaza pública frente al colegio y la mejora de los espacios de las calles Manuel Villalobos y Doctor Jiménez Díaz. En toda la zona se amplía el arbolado con la plantación de 141 ejemplares que se suman a otros 79 que se han conservado. En total, se pasa de 130 árboles que había a 220. Se incorporan además zonas ajardinadas y un sistema de Drenaje Urbano Sostenible. Se habilitan nuevos espacios de convivencia y una fuente en el cruce con la Ronda histórica.

Como complemento se aplicarán técnicas de climatización de la zona a través de un modelo que nace en la investigación realizada para Cartuja Qanat y que durante 2023 generará espacios climáticamente adaptados en el patio del colegio, la nueva plaza y la parada de autobús.

“La inversión para la transformación de la Avenida de la Cruz Roja es uno de los grandes proyectos que hacen barrio, que hacen ciudad y que responden al modelo de la Sevilla que queremos para la próxima década. Esta es una gran inversión y una gran apuesta por una ciudad sostenible, habitable y accesible. Una transformación completa en la Macarena que va a suponer un impulso para la actividad económica, la convivencia y la movilidad en todo el entorno”, explica el alcalde de Sevilla Antonio Muñoz.