El San Fernando tuvo una ajetreada mañana el lunes 29 de abril en el inicio de la semana y tomó las decisiones más drásticas de cara a un futuro inmediato. Los mandamases del conjunto de La Isla, con el presidente Louis Kizinger acompañado del Director Deportivo, Miguel Chocarro, a la cabeza, tomaron la decisión que menos gusta en esto del fútbol, cesar al entrenador.

De esta forma, y tras reunirse con Alfredo Santaelena, se le comunicó que no continuaría, de manera inmediata, como máximo responsable del primer equipo de la ciudad. Sin duda alguna, los dos últimos resultados cosechados por el equipo azulino, con la derrota en Granada ante un Recreativo ya descendido y la que se produjo ante el Real Madrid Castilla el pasado sábado, fueron determinantes.

Por ese motivo se ha decidido dar un golpe de timón para las cuatro jornadas que restan de competición liguera, concretamente el domingo ante el Melilla, el próximo domingo ante el Málaga en casa y los dos últimos sábados, el primero de ellos en Sanlúcar y el Linares en casa para cerrar la temporada.

Sin tiempo para asimilar la noticia, el equipo isleño anunció el nombre del sustituto del madrileño. El hombre elegido para sacar de la situación que padece el San Fernando CD es Nano Rivas. El entrenador, que llegó a La Isla en la noche del domingo y en la mañana del lunes ya tomó las riendas de sus nuevos pupilos será el encargado de intentar obrar el milagro de la salvación.

El tercer técnico que se sienta en el banquillo azulino esta temporada 2023-24. Comenzó Héctor Berenguel, que duró hasta la octava jornada. Tras su destitución, tomó el relevo Alfredo Santaelena, despedido tras el 34º capítulo liguero. Ahora llega el turno del entrenador que recibe el encargo de guiar al equipo a la permanencia.

Nano Rivas fue, como jugador, aquel central aguerrido que jugó 158 partidos en Primera División, en equipos tan emblemáticos como el Betis, Getafe, Levante o Valladolid, para, una vez colgadas las botas entrar en el mundillo de los entrenadores.

Su carrera tuvo inicio como segundo de Vicente Moreno en el Nástic de Tarragona (2015-16) y, tras debutar como primer entrenador en el filial del Getafe CF (2016-17) volvió al Nou Estadi de Tarragona para la recta final de competición para lograr la permanencia en Segunda con el Nástic haciendo pleno de puntos en las tres últimas jornadas.

El nuevo entrenador del San Fernando volvió al equipo catalán a principios del 2018 y, tras su nuevo paso por el Tarragona probó fortuna en el fútbol belga dirigiendo al KSV Roeselare. En su última etapa en los banquillos adquirió experiencia en Primera División formando parte del cuerpo técnico de Quique Sánchez Flores, con el que también trabajó en el SH Shenhua de la Superliga china.

En la jornada del martes, tras realizar su segundo entrenamiento, será presentado a los medios de comunicación para intentar esclarecer que es lo que trae debajo del brazo para poder girar una nave que parece tener grietas de agua por todos lados.

El propio Chocarro señalaba que “nos vemos en la triste y complicada situación de intentar dar un golpe de efecto” porque “aunque tenemos un tiro dado, todavía nos queda vida”, por lo que “hay que ponerlo todo para que en estas cuatro jornadas se intente, por todos los medios, el dar un giro y lograr esos diez puntos que nos faltan para mantener la categoría”.

El máximo mandatario deportivo del equipo azulino insistía que “el fútbol es así de ingrato” por lo que “en muchas ocasiones pagan los platos rotos, quien no se lo merece”, como es el caso de la destitución de un entrenador que se marcha con el equipo en puestos de descenso y sin poder haber corregido las carencias que ha mostrado, sobre todo en cuanto a gol se refiere, el cuadro de La Isla.

Melilla es objetivo primordial de un San Fernando al que se le irá, en tierras norteafricanas, la vida que le queda o, por el contrario, comenzará el resurgir en pos de la salvación, pero todo de la mano del nuevo técnico Nano Rivas.