Una de las claves de la estrategia de Atalaya Mining es mantener una operación segura y saludable, aspirando al objetivo CERO DAÑOS en la mina de Riotinto, un centro de trabajo que acoge cada día a más de 1.000 personas. Para contribuir a lograr esta ambiciosa meta, existen multitud de herramientas que Atalaya pone en práctica en sus planes preventivos, incluyendo algunas muy innovadoras. Así, recientemente ha puesto en marcha una nueva tecnología de realidad virtual para formar a sus empleados concienciándolos sobre la realidad del riesgo.

Se trata de un nuevo sistema de formación háptica basada en la realidad virtual inmersiva, al modo de un videojuego. Esto es, el alumno se coloca un dispositivo de gafas 3D que lo sitúa en posición de realizar un trabajo en el que se presentan determinados riesgos. De esta manera, el participante experimenta en primera persona cómo detectar y mitigar estos riegos, aprendiendo a gestionarlos cuando aparezcan en la vida real.

El software es capaz de emular las situaciones con un alto grado de realismo, sorprendiendo mucho la simulación de trabajos en altura o el uso de extintores manuales de protección contra incendios. El resultado impresiona y es motivador según los propios participantes, haciendo que se tome conciencia de lo que implica una caída en altura o un uso adecuado del extintor. Para Luis, empleado en Atalaya, “el realismo es verdaderamente impactante. Realicé trabajos en altura y extinción de incendios, y puedo corroborar que hay un salto cualitativo en el aprendizaje cuando lo vives en primera persona”.

Para Sergio, también empleado en Atalaya, “la experiencia es muy diferente a otros cursos teóricos o prácticos. Yo realicé el curso en extinción de incendios y creo que puede ayudar a salvar vidas”. La efectividad y buena acogida de esta iniciativa anima a continuar en esta línea, y ya está confirmado que en 2024 se va a mantener la formación ampliando a otras labores mineras, como el manejo de maquinaria, siempre con el concepto de seguridad en el trabajo.

La experiencia es muy diferente a otros cursos teóricos o prácticos.

Se trata de un impulso más a la creación de una cultura preventiva fuerte, estable y transmitida a través de los propios empleados, clave para los objetivos marcados por Atalaya, que en su afán por que Riotinto sea un lugar 100% seguro extiende esta Política de Seguridad y Salud a todas las personas que acceden a las instalaciones.

Este reto, además del estricto cumplimiento de la legislación en todos los ámbitos, obliga a establecer sistemas de gestión basados en estándares internacionales y someterlos a controles internos y externos que garanticen su cumplimiento. Y para ello, contar con las tecnologías de vanguardia que ofrece el mercado. “La prevención en riesgos laborales es una carrera a largo plazo, en la que vamos midiendo regularmente diferentes indicadores para cerciorarnos de que vamos en la dirección correcta”, explica Isabel Zamora, responsable del Servicio de Prevención Propio. “En una operación minera como la nuestra es prioritario contar con planes especializados en diferentes labores con riesgos asociados, como pueden ser los espacios confinados o trabajos en altura, y para ello, la tecnología es nuestra mejor aliada”, destaca.

La prevención en materia de seguridad y salud es el principio básico para cualquier actuación en la operación minera de Riotinto.

La prevención en materia de seguridad y salud es el principio básico para cualquier actuación en la operación minera de Riotinto. Son muchas las iniciativas que contribuyen a esta cultura de la seguridad, buscando siempre el objetivo marcado por Atalaya: CERO DAÑOS. Esto incluye, por ejemplo, los Premios Santa Bárbara a las mejores iniciativas en prevención que mejoren la seguridad en las instalaciones; los trabajos de la Brigada de Primera Intervención, o la formación en diferentes campos haciendo uso de las mejores técnicas disponibles, entre otras muchas actividades.

“La seguridad y salud la hacemos todos los días, a pie de tajo, no solo hoy día 28 de abril, pero es bueno que conmemoremos esta fecha, como recordatorio de las muchas acciones que se planifican, desarrollan e implementan a lo largo del año. Es el día de aumentar la conciencia y compartir lo que nos aporta valor, aquello que impulsamos juntos como organización, desde la dirección de la empresa hasta el operador, que día tras día trabajamos para hacer de nuestra instalación minera un referente en el cuidado de las personas”, recalca Zamora.