Mijas

'Operación Cuento' en Mijas: quedaban con sus víctimas en una red de citas para, después, asaltarlas y golpearlas

Un agente de la Guardia Civil, de espaldas, junto a un vehículo policial.

Un agente de la Guardia Civil, de espaldas, junto a un vehículo policial. / M. H. (Málaga)

La Guardia Civil, en el marco de la 'Operación Cuento', ha desarticulado un grupo criminal compuesto por tres personas, dos hombres y una mujer, que han sido detenidos por los delitos de pertenencia a organización criminal y robo con violencia e intimidación en el municipio malagueño de Mijas.

La investigación se inició tras tener conocimiento de la denuncia de dos hombres que manifestaban haber sufrido un robo tras concertar una cita en una conocida red social, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

Los autores quedaban con la víctima en una vivienda y, mientras uno de ellos lo distraía, los otros dos lo inmovilizaban e intimidaban llegando a golpearlo para que le diesen en dinero que portaba.

Tras las gestiones oportunas fueron identificados los autores, dos hombres y una mujer, iniciándose un dispositivo para su búsqueda y localización, encontrándose uno de ellos en ese momento en prisión por otros delitos; siendo finalmente detenidos los tres individuos por los delitos de pertenencia a organización criminal y robo con violencia e intimidación.

A prisión los tres asaltantes

Por los hechos instruyeron las correspondientes diligencias, que junto con los detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que decretó el ingreso en prisión de todos ellos. Esta operación ha sido desarrollada por efectivos del Puesto Principal de Mijas de la Compañía de la Guardia Civil de Marbella.

El atracador que actuaba armado y disfrazado 

Por otra parte, la Policía Nacional y la Guardia Civil han detenido en Málaga al presunto autor de varios atracos en gasolineras y bancos en diversas localidades de la provincia de Cádiz. Los ilícitos fueron perpetrados desde el pasado 20 de enero de 2024 en municipios gaditanos como La Línea de la Concepción, Jerez de la Frontera, Los Barrios y Algeciras. Todos ellos se atribuyen al mismo individuo, el cual se valía de diferentes prendas a modos de disfraz para evitar ser identificado, esgrimiendo en estos a modo intimidatorio un arma de fuego.

El primero de los atracos investigados tuvo lugar en la Línea de la Concepción, el pasado día 20 de enero, al irrumpir este hombre en una gasolinera ubicada en la avenida Ronda Norte, logrando robar 100 euros ataviado con una bufanda, una mascarilla quirúrgica y gorra.

El segundo ilícito sucedió en Jerez de la Frontera el pasado día 12 de marzo, igualmente en una gasolinera situada en Carretera de Medina, logrando el autor del asunto la sustracción de 75 euros intimidando con el mismo arma a una empleada, bajo las prendas de una bufanda, un gorrapeluca y un mono de trabajo rojo, emprendiendo la huida en dirección a Los Barrios, donde transcurridos apenas 56 minutos decidió cometer un nuevo ilícito en una gasolinera ubicada en la autovía 381, de donde logró llevarse 405 euros.

Intentó robar un coche en Estepona

El 18 de marzo el investigado se desplazó hasta Estepona, donde intentó robar sin éxito un vehículo en el parking exterior de un establecimiento comercial. El detenido apuntó con un arma a la conductora del coche y tras amenazarla, intimidarla y golpearla, tuvo que desistir de su intención de sustraer el vehículo ya que varios viandantes que observaron la agresión no dudaron en auxiliar a la víctima. El agresor huyó del lugar desprendiéndose de la ropa que vestía, cambiando su apariencia con otras prendas de vestir.

El 22 de marzo, el presunto autor de los hechos ejecutó un atraco en una sucursal bancaria en la localidad de la Línea de la Concepción, valiéndose de peluca, gorra y braga de cuello para ocultarse y con el mismo arma de fuego para intimidar a la trabajadora de dicha entidad y sustraer la cantidad de 100 euros.

El día 27 de marzo cometió un nuevo ilícito, en esta ocasión en la localidad de Algeciras, en un banco. De nuevo, vestía ropa a modo de disfraz, valiéndose del arma de fuego para intimidar a la empleada y lograr la sustracción de 2.000 euros.

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