El Ayuntamiento de Sevilla, en su particular cruzada contra las pintadas, completó 420 limpiezas durante el pasado mes de marzo. Se trata de una cifra muy importante que coincidió en el tiempo con la celebración de la Semana Santa, por lo que el equipo de gobierno de José Luis Sanz puso un especial énfasis en tener las calles en el mejor estado de revista posible para el paso de las procesiones. El Casco Histórico fue la zona en la que más se actuó gracias a la llamada unidad antigrafiti, formada por diez equipos, de dos operarios cada uno, para combatir diariamente las pintadas en la ciudad, que fue adjudicada a la Unión Temporal de Empresas (UTE) Haler S.A e Integra MGSI CEE Andalucía S.L. con un contrato de 2,6 millones de euros y una vigencia de dos años.

Los trabajos ordinarios llevados a cabo durante el pasado mes de marzo ascendieron a 436. De ellos, se pudieron completar con éxito un total de 420. Además, se apuntaron 7 actuaciones que no se podían llevar a cabo en esos momentos por distintas circunstancias, otras 6 que quedaron pendientes por la climatología adversa y tres intervenciones que no fueron autorizadas por los propietarios del inmueble. Igualmente, se limpiaron 11,40 metros cuadrados de grafitis en altura.

El antes y el después de una limpieza en la calle Virgen de Gracia y Esperanza.

En el casco histórico la limpieza de grafitis se llevó a cabo en más de un centenar de calles: Cardenal Cisneros, Castellar, Correduría, Cristo del Buen Fin, Curtidurías, Deán López Cepero, Eduardo Cano, Enladrillada, Feria, Francisco Carrión Mejías, Goles, Hernán Cortés, Hiniesta, Imaginero Castillo Lastrucci, Jesús del Gran Poder, Juan Rabadán, María Auxiliadora, Matahacas, Miguel Cid, Morgado, Muñoz Torrero, Muñoz y Pabón, Niño Ricardo, Padre Luis María Llop, Parras, Pascual de Gayangos, Peñuelas, Pescadores, Pinto, Pozo, Puerta Osario, Regina, Relator, Rodríguez Marín, San Eloy, San Juan, San Juan Bosco, San Luis, San Miguel, San Vicente, Santa Ana, Santa Bárbara, Santa Clara, Santa Paula, Santiago, Sol, Teodosio, Virgen de los Buenos Libros, Virgen del Carmen Dolorosa, Zamudio, Azofaifo, Pasaje Mallol, Pasaje de Valvanera, Alcalde Marqués del Contadero, Paseo de las Delicias, Plaza de la Gavidia, Plaza de Pilatos, Plaza del Pumarejo, Plaza de San Ildefonso, Plaza de Santa Isabel y Plaza de Zurbarán.

Los nombres de los 'grafiteros'

Una de las novedades de las fichas de detección y limpieza elaboradas por los equipos de la llamada UTE Protección Paisaje Urbano de Sevilla es que se identifica cuando es posible al autor de la pintada. Algunos de los nombres identificados son: Furia, KMR, Amnesia, Safary, Chito, Jade, Gevo, Scabs, Glop, MRV, No Yuri no party, Narf, Bloom, Bomb o Pachxo.

El alcalde presentó a finales del pasado mes de diciembre esta nueva unidad antigrafiti que funciona por toda la ciudad gracias al contrato que se adjudicó por con una duración de dos años por 2.600.000 de euros. Está compuesto por 10 equipos –un total de 20 trabajadores– que cada día quitarán pintadas por todos los barrios, empezando por el centro, uno de los distritos más castigados.

Para una mejor ejecución de los trabajos, se organizaron hasta seis zonas específicas de actuación, que son: el Conjunto Histórico, Triana – Los Remedios, Bellavista – La Palmera, Sur, Nervión – San Pablo – Cerro Amate, Macarena – Norte y, Este – Alcosa – Torreblanca.

La limpieza de un muro en Santa Isabel.

La prioridad, como se informó entonces, es la eliminación de grafitis y manchas de pintura en los espacios urbanos protegidos, en los entornos de los Bienes de Interés Cultural o inmuebles con algún tipo de catalogación, aunque se actúa en todo tipo de fachadas.

El Ayuntamiento también anunciaba entonces una nueva ordenanza de limpieza que endurecerá las multas contra este tipo de actos. Una sanción que será aún mayor –a partir de 3.000 euros– si el inmueble dañado está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC). Hasta ahora, la normativa permite aplicar sanciones de hasta 750 euros por infracciones leves, hasta 1.500 euros por infracciones graves y hasta 3.000 por las muy graves. Por tanto, la sanción considerada como muy grave pasaría a ser la multa mínima en determinados casos. El documento inicial de la nueva Ordenanza de Limpieza del Espacio Público y Gestión de Residuos Municipales fue aprobado por la junta de gobierno municipal hace unos días.