Uno de los momentos más esperados por los sevillistas cada temporada ha llegado. El club nervionense visitará el Benito Villamarín para un derbi liguero más, con una situación más tranquila en la tabla tras vencer al Mallorca, pero con la misma ilusión y tensión que imprimen cada partido como este. Aliciente añadido es lo que tiene en juego el conjunto verdiblanco: entrar en Europa.

El Sevilla no estará solo en el estadio heliopolitano. El Real Betis cedió al club nervionense un total de 530 entradas, las cuales tienen un precio de 30€ cada una. La entidad hispalense, como es costumbre, las ha sometido a sorteo y, según ha podido saber Diario de Sevilla, más de 10.000 sevillistas, en concreto XXX, se han apuntado al mismo.

El Real Betis-Sevilla FC, en imágenes

Desde peñas, grupos de amigos y familias hasta aficionados por separado se han apuntado a un sorteo que, como cada año, se vuelve multitudinario. Toda la hinchada sevillista quiere ver un derbi desde dentro. Sin embargo, sólo 530 serán los agraciados y se conocerán a partir de las 10.00 horas del jueves 25 de abril, tres días antes de que comience a rodar el balón por el Benito Villamarín.

Los aficionados sevillistas se colocarán en la parte alta de Gol Norte, pegado a Fondo, popularmente conocida entre los nervionenses como 'La Jaula'. Estarán escoltados por numerosos policías y cuerpos de seguridad, ya que el derbi, evidentemente, está declarado un partido de riesgo. Además, exhaustivos registros y cacheos se producirán a su entrada en el estadio para evitar cualquier altercado.

Hora y lugar de citación

Los aficionados sevillistas agraciados en el sorteo, tendrán que recoger su entrada el mismo domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán, acompañados de su DNI y su carnet para justificar la compra (30€) y la recogida de la misma. En torno a tres horas antes, partirán desde el estadio nervionense hasta el Benito Villamarín, escoltados por los cuerpos de seguridad.

Saldrán, como cada año, entre cánticos y aplausos desde Nervión... y serán recibidos con pitos a su llegada a Heliópolis. A paso ligero, el cortejo de aficionados es, siempre, una de las imágenes más notorias y protagonistas en los derbis sevillanos.