Ramón Valencia, empresario de la plaza de la Real Maestranza de Sevilla, se ha desayunado hoy con la polémica supresión del Premio Nacional de Tauromaquia orquestada por el ministro de Cultura, Ernest Urtasun. El gerente de la empresa Pagés ha señalado que “nos podíamos esperar cualquier cosa de este ministro; debería haber sido más inteligente y considerar que es ministro de todos los españoles y la tauromaquia ocupa un gran lugar en este país”. Valencia considera que “debería haber sido más respetuoso, manteniendo ese premio nacional”.

En cualquier caso, el empresario del coso sevillano prefiere ser pragmático. “Los ministros van y vienen, duran un año, tres o cuatro y viene otro distinto pero ésa es la pena, no hay una idea de país sino el criterio de un ministro que, por pasajero, no nos debe atemorizar”.

Valencia rebate los datos aportados por el ministerio, que minimizan el interés de la tauromaquia, señalando que “los toros van a más y cuando se ofrece calidad la gente responde”. El gestor finaliza argumentando que “el momento más crítico que ha sufrido el sector fue la pandemia… y pasó”.

Victorino Martín: "Mala noticia para la democracia y la libertad de expresión de este país"

El presidente de la Fundación para el toro de lidia, Victorino Martín, ha señalado que "la exclusión por razones ideológicas de la tauromaquia en los Premios Nacionales de Cultura es una mala noticia para la democracia y la libertad de expresión de este país".

Martín ha calificado de "censura cultural por razones ideológicas" la decisión ministerial, además de añadir que "afortunadamente, la tauromaquia goza de una salud extraordinaria como lo demuestra la reapertura de plazas, la vuelta del público más joven y el aumento del número de festejos."

El ganadero de reses bravas ha apuntado además que "afortunadamente este ministro pasará, vendrá otro y la tauromaquia seguirá estando muy viva".

La última medalla de las Bellas Artes para el toro… por ahora

El ganadero Eduardo Miura, que fue saludado por el propio Urtasun en la entrega de la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes que recogió en nombre de la mítica ganadería sevillana, aludía a otros sectores como la cacería, “que también están en entredicho”. El prestigioso criador de bravo ha destacado la importancia económica de la actividad taurina pero, como Ramón Valencia, propone esperar acontecimientos. “El mundo da muchas vueltas y lo que hoy es blanco mañana es negro y al otro día podrían llegar otros; todo es política” añade Miura recordando que, en pleno franquismo, “se quiso poner un impuesto de lujo a los toros y se organizó una tremenda con Fraga Iribarne”.

Dávila Miura: "La sensación es de indefensión"

Su sobrino, el matador de toros Eduardo Dávila Miura, ha abundado en la misma línea. “La sensación es de indefensión” ha precisado el actual teniente de hermano mayor de la Macarena explicando que “no se dan cuentan de lo que es y significa el toreo; en una democracia, más allá de las tendencias de cada formación política, deben tener consciencia de lo que genera esta actividad”. Dávila ha hablado de números y cifras… “es que es una evidencia, la gente va cada vez más a los toros, la juventud se está acercando como nunca a esto y ahora, con un premio que creó el PSOE, ¿cómo puede tener el ministro la osadía y la irresponsabilidad de iniciar estos trámites?

José María Garzón: "No cumplen con la ley"

El empresario José María Garzón, por su parte, considera que vivimos “en una dictadura”. “Es un gobierno que sólo gobierna para los que ellos quieren, que no cumplen con la ley que protege la tauromaquia y que campan a sus anchas” ha añadido el gerente de Lances de Futuro –gestiona, entre otras, las plazas de Córdoba, Santander, Málaga y Cáceres- subrayando que “lo que está pasando en España es muy grave; quieren controlar los medios, a los jueces… lo que no les gusta a ellos lo quitan de en medio; en los presupuestos generales del estado sólo hay 65.000 euros para la tauromaquia… se está viviendo una situación muy delicada que sólo es el camino de una dictadura; con todo lo que representa la tauromaquia, que le quiten los premios nacionales es una barbaridad y una prevaricación”, ha sentenciado.

Hablan los presidentes de las asociaciones profesionales

Este coro de reacciones se completa con la de Antonio Bañuelos, presidente de la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia, la asociación que agrupa a las principales divisas de bravo. Para el ganadero burgalés, en declaraciones a EFE, la eliminación de este premio es “muy desafortunada, como ya fue la elección de ese señor, declaradamente antitaurino, para dirigir un ministerio de Cultura que tiene la obligación de defender y promover todas las actividades que están en su seno”.

“Urtasun argumenta para tomar esta decisión que las tradiciones cambian, pero no lo hacen unilateralmente, como él pretende -ha afirmado-. Además ha elegido unas fechas muy poco oportunas para hacer esto, porque estamos a punto de ver que la plaza de Las Ventas va a llenarse a diario con 23.000 personas en la Feria de San Isidro durante todo un mes, algo que no consigue ninguna otra actividad cultural”.

“Aunque Urtasun ya venía amenazando con esto desde que asumió el cargo, él dejará el ministerio y la tradición y el respeto de la tauromaquia seguirán. Y lo harán como hasta ahora, aportando 130 millones de euros a las arcas del Estado en concepto de IVA, mientras que los toros solo recibían del Estado dos partidas de 30.000 euros, una de las cuales acaba de eliminar”, ha concluido el presidente de los ganaderos.

El Fundi: "Va contra la voluntad de una parte importante de los españoles"

También se refiere a las cifras de la tauromaquia el diestro retirado José Pedro Prados El Fundi, como presidente de la Unión de Toreros, asociación que representa a la mayoría de los matadores de toros de alternativa, y que califica la eliminación del Premio Nacional de Tauromaquia como una decisión “vergonzosa” y que va “contra la voluntad de una parte muy importante de los españoles”. Para El Fundi, no deja de ser “chocante” que Ernest Urtasun tome esta medida “justo en el momento en que más gente, y sobre todo gente joven, está volviendo a ir a los toros, como se está viendo en las últimas ferias, con las plazas llenas casi todas las tardes, lo que no deja de ser un contrasentido”, ha dicho.

El presidente de los toreros asegura también que, para justificar la medida, el Ministerio de Cultura está usando "unos datos muy sesgados, pues toman como referencia del nivel de asistencia de público la temporada de 2021, cuando aún se aplicaban las limitaciones del covid, o comparan con las cifras del año 2007, justo antes de la gran crisis económica que afectó a los toros pero también a todas las demás actividades culturales, que también cayeron notablemente”.

Las principales asociaciones taurinas piden la dimisión de Urtasun

La Fundación del Toro de Lidia ha encontrado el respaldo de la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia, la Unión de Toreros, la Asociación Nacional de Organizaciones de Espectáculos Taurinos (ANOET) y Alianza Rural -que representa a las entidades más relevantes del campo español- que exigen a coro la dimisión del ministro de cultura Ernest Urtasun ante lo que consideran “un nuevo ejercicio de censura que ha cometido al decidir eliminar el Premio Nacional de Tauromaquia de su ministerio”.

“Esta decisión es un insulto, ya no sólo a la actividad económica cultural más importante de nuestro país, sino que también es un atentado contra la ley 18/2023 que establece que el Estado debe proteger y promover a la Tauromaquia, responsabilidad directa del Ministro, añaden las cinco entidades en un comunicado que suscriben de forma conjunta.

“La Tauromaquia es símbolo del mundo rural de España y de sus costumbres. Legislar de espaldas a tantos y tantos espectadores que llenan las plazas de toros, así como a aquellos que corren encierros o celebran sus festejos populares en las calles, o de las gentes del campo que viven por y para el toro bravo, es un ejercicio de totalitarismo más propio de otros regímenes” señala la misma nota de prensa añadiendo que esta decisión amparada en que, según el ministro Urtasun, las tradiciones evolucionan y ahora hay una mayoría social en contra del maltrato animal, “no es que resulte constitutiva de atentar contra la democracia, sino que es una aberración para quienes defendemos y respetamos el toro bravo como paradigma real de bienestar animal”.

Las organizaciones firmantes exigen la dimisión del ministro y agradecen el apoyo por parte de los gobiernos autonómicos que demuestran estar implicados en dignificar la actividad cultural taurina y el mundo rural español.