En un intento de paliar la exclusión financiera y con el objetivo de implicar a las entidades financieras, la Junta de Andalucía y las diputaciones provinciales han concretado los detalles de su plan para que todos los municipios andaluces dispongan al menos de un cajero automático. En la actualidad hay 85 pueblos en los que viven 110.000 personas que no disponen de ninguno de estos dispositivos, algo que según el Gobierno andaluz, favorece la despoblación y fomenta el aislamiento de las zonas rurales.

En concreto, el plan Cajeros para los Pueblos se aplicará a 25 municipios de la provincia de Almería, dos a Cádiz, tres a Córdoba, 17 a Granada, cinco a Huelva, uno a Jaén, 27 a Málaga y cinco a Sevilla que en la actualidad carecen de servicios bancarios de ningún tipo

Este plan incentivará, junto a las diputaciones provinciales, no sólo la instalación de cajeros automáticos en los municipios y entidades locales autónomas de toda Andalucía que carezcan de oficinas bancarias físicas y cajeros automáticos, sino que también se subvencionará su puesta en funcionamiento y el mantenimiento de dichos dispositivos.

Además de combatir la exclusión financiera y bancaria, el objetivo de la iniciativa según el portavoz de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, es "facilitar la participación de todos los andaluces en la vida política, económica, social y cultural, mediante el impulso y planificación de la actividad económica y la promoción de la economía en general". 

El plan prevé dos medidas paralelas: la primera es la firma del protocolo entre la Consejería de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, las ocho diputaciones provinciales y las entidades financieras interesadas, con las que ya se han iniciado las conversaciones para asegurar una provisión adecuada de servicios financieros físicos. La segunda es la creación de una línea de subvenciones, cuya orden de aprobación de bases se encuentra ya en el inicio de su tramitación, orientada a municipios y entidades locales autónomas sin oficinas bancarias ni cajeros automáticos.

A partir de 2024, año de inicio de la convocatoria, se subvencionarán tanto los gastos de instalación y puesta en funcionamiento de los cajeros automáticos como su mantenimiento. Esta subvención será sufragada a partes iguales entre la Junta y la diputación correspondiente, aportando cada administración el 50% de la inversión total.

Según la Junta "las personas de mayor edad se han visto afectadas de una manera especial por el progresivo cierre de las entidades bancarias en muchos pueblos andaluces y se han visto privadas de su derecho a poder acceder a los servicios financieros básicos". A pesar de que "las nuevas soluciones digitales aportan grandes y eficaces ventajas en el desempeño de la vida diaria para, por ejemplo, agilizar trámites burocráticos", para el Gobierno andaluz resulta "esencial no olvidar que una parte de la población se siente marginada de este avance y, además, las zonas rurales aumentan de manera considerable el riesgo de despoblación".

Con esta iniciativa se pretende "ayudar a que en los pueblos cada vez se tengan más facilidades y evitar que muchos andaluces deban ir a buscar esos servicios financieros a otras localidades cuando, en ocasiones, no disponen de la manera para trasladarse o su edad avanzada les impide recorrer esos kilómetros".